El curioso incidente del perro a medianoche

Pasaban 7 minutos de la medianoche. El perro estaba tumbado en la hierba, en medio del jardín de la casa de la señora Shears. Tenía los ojos cerrados. Parecía estar corriendo echado, como corren los perros cuando, en sueños, creen que persiguen a un gato. Pero el perro no estaba corriendo o dormido. El perro estaba muerto.
Etiquetas: claurus, mark haddon
2 comentarios:
Claurus, deberías etiquetar el nombre del autor para que se puede indizar.
Buen principio y buena novela, me salvó del aburrimiento lector hace un par de años.
Oh, me encanta. Lo compré hace casi tres años junto a "Océano Mar" y una auténtica maravilla: "Timoleón Vieta vuelve a casa"
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